viernes, 25 de mayo de 2018

Propuesta en cultura


Propuesta de Acción de Gobierno en Cultura

Pterocles Arenarius


Exposición de motivos.
La cultura es todo cuanto hacemos los humanos. Sin embargo, conviene hacer una diferencia esencial y también pragmática. La diferencia a establecer es porque existe algo que se suele llamar alta cultura. La mera existencia de la alta cultura nos indica que dentro de ese término existe la alta cultura y en este momento anotamos que tal concepto se refiere al arte. “Si todo lo que hacemos es cultura, no todo lo que hacemos, incluso muy poco de lo que hacemos, es arte”. Cualquier actividad humana, sin embargo puede alcanzar la estatura del arte.
El arte definamos tan sencillamente como sea posible― es lo bello. Como estamos hablando de un producto de elaboración humana, el arte es lo que se ha fabricado de una manera que resulta imposible de superar. El arte es un objeto salido de mano humana que se aproxima evidentemente, a primera vista; a la perfección. El objeto que alcanza estatura de arte contiene la manifestación asombrosa de la destreza, fuera de lo ordinario, del artífice creador. Pero va aún más allá. El objeto que contiene arte debe tocar los sentimientos del espectador. Tiene que provocar emociones al que lo percibe.
Sinteticemos para que, en alguna medida, se defina lo que conocemos como alta cultura o arte. El arte es un alarde de técnica, de rigor en acción, de disciplina creativa, de conocimiento e incluso de método, pero que reúne, además, lo intangible de los seres humanos, sus sentimientos, la conmoción, porque en el objeto artístico se encuentra plasmada la parte profunda de un ser humano: sus emociones, las que, a través de un prodigio que no tiene que ver con la disciplina ni con el rigor, toca los sentimientos de quien observa la obra, lo conmueve. El arte, además de ser un producto único e imposible de mejorar, tiene que palpar las honduras más sensibles de lo humano. Así, el arte es el equilibrio supremo de lo bien hecho y, al mismo tiempo, lo conmovedor. El arte, al fin, además de la admirable elaboración que tiende a lo perfecto, es también un acto de amor. Es seducción del artífice por su espectador.
Existe, indudablemente, lo que suele llamarse arte popular en contraposición con lo que hemos dado en nombrar arte culto. Diferencia que, por el momento, para esta propuesta, habremos de obviar.

En este texto se exponen las acciones posibles para llevar a la realidad una profusa actividad artística en el ámbito territorial de la Delegación llamada Venustiano Carranza (VC).
Un primer diagnóstico de la actividad cultural en esta delegación es deprimente. La cultura y el arte son entidades desconocidas, prácticamente inexistentes e incluso confundidas para empezar por las propias autoridades. Entre la población llana de VC es notable que aquí se cumple la encuesta de lectura de entre los mexicanos que encuentra que en nuestro país se leen 1.5 libros por habitante por año. La educación estética de la población se ha encargado a los creadores de contenido que sistemáticamente han degradado lo que en algún momento podría haberse llamado arte rebajándolo con toda consciencia, convirtiéndolo en un entretenimiento pueril y, de ser posible, asombrosamente estúpido. Televisa y Tv Azteca son los encargados de la formación que debería ser imprescindible, irrenunciable en todo ser humano: la formación, educación y sensibilización artística. Nadie tiene idea de lo que pierde una persona que carezca de formación artística. Una persona que no haya tenido instrucción académica al igual que formación en el ámbito del arte, no exagero, si se le compara con quien ha ido a la universidad y gozado de la música, de las bellas artes, la literatura, está ―y lamento mucho decirlo― en una desventaja tan brutal como la de un hombre de las cavernas frente a uno moderno.
Hay que decir que los malos gobiernos, los que tienen postrado al país en el baño de sangre, el estancamiento económico y gran pobreza de la inmensa mayoría, quisieran que los mexicanos no tuvieran educación de ninguna índole, que no aprendieran jamás a tocar un instrumento musical, que no se aproximaran a la gran literatura ni a la danza o el cine. Porque el arte nos aproxima a la consciencia y también desarrolla nuestra suprema facultad del raciocinio, la inteligencia. Y ningún ciudadano consciente, razonador, inteligente entregará el poder a políticos mediocres, incultos, insensibles y pendejos; pero eso sí, muy astutos, muy oportunistas, muy indignos y muy voraces para el dinero.
Tal es la situación de la cultura en VC. Los artistas, que los hay, en nuestra delegación, tienen que conformarse con actos marginales, en otros lugares de la ciudad, con la resignación a la falta de trabajo, al anonimato, la incomprensión y aun la miseria.
Las casas de la cultura están ocupadas en labores que no tienen que ver con el arte o, al menos, se usan siempre en actividades de las que está ausente la alta cultura. Entiendo que hay un organismo de cultura en la delegación, ignoro incluso si es dirección o subdirección o JUD y casi siempre está unida a la de deportes. Pero brilla este organismo delegacional, brilla por su ausencia y su inactividad. No hay cultura en VC.
En el próximo gobierno de la ciudad, dando por descontado que Morena habrá de ganar las elecciones y que lo hará en una circunstancia que por tradición ya llamamos carro completo, esto es, la delegación, la ciudad y la presidencia, es en donde se hace esta propuesta. Considerando, además, que el gobierno de Claudia Sheinbaum, como lo ha difundido, hará un gran proyecto que dé total prioridad a la cultura, a la cultura de la que se habla en este texto y que tendrá como su secretario de Cultura al que quizá sea el más importante escritor mexicano de este momento, Paco Ignacio Taibo II, quien además de importante como autor es también un notorio activista de la cultura en general y de la literatura y la lectura en particular, y que juntos, Claudia y Paco, han asegurado que llevarán a cabo un programa inusitado, masivo, ambicioso como nunca, intenso e intensivo, espléndido, de cultura en la ciudad, es en función de tal consideración que se crea esta propuesta.
Y atendiendo a que la promoción de la cultura desde el gobierno central bajará a todas las delegaciones, proponemos:
  1. Que las casas de la cultura se dediquen a eso, a la cultura (también danza hawaiana, baile de salón, migajón o zumba, de acuerdo, no que se cancelen). Pero que haya en todas las casas de la cultura clases de música, talleres de literatura tanto en creación como en apreciación, de danza, de artes plásticas, de teatro, de cine, de otras expresiones artísticas como el performance y la instalación.
  2. Que todas las actividades de las casas de la cultura sean gratuitas.
  3. Que todos los talleres, como retroalimentación, tengan presentaciones públicas en festivales que tengan apoyo logístico y económico de la delegación.
  4. Que se creen libroclubes con dotación de acervo para que funcionen promoviendo la lectura de textos literarios y que esta promoción esté acompañada de un conocedor de la literatura que guíe a los ciudadanos que asistan a los libroclubes para que hagan lecturas de acuerdo a sus intereses por edad u otras condiciones. La propuesta incluye que estos libroclubes funcionen como lo hacían en la época en que el poeta Alejandro Aura los creó, promovió y auspició. Además debemos aprovechar que esta iniciativa es del plan Sheinbaum-Taibo de cultura para la ciudad. Y la delegación debe contar con la infraestructura humana para recibir los beneficios del gran proyecto cultural del gobierno central de la ciudad.
  5. Es vergonzoso que la delegación no tenga una orquesta. Habría que fundar la Orquesta Sinfónica de la VC. O al menos una presentable orquesta de música mexicana.
  6. Es no menos una vergüenza que la delegación no tenga una publicación literaria en la que, con el rigor de un consejo de redacción de buen nivel, publique los trabajos literarios de los artistas que habitan en esta demarcación.
  7. Que haya clubes de ciencia, de filosofía, de historia, que se reúnan periódicamente y den conferencias y debates en los diversos locales oficiales o no por toda la delegación.
  8. Que se establezca un proyecto de promoción de los talentos de esta delegación: estudiantes prominentes, escritores, bailarines, actores, músicos, pintores o escultores. Para que así los artistas hagan presentaciones en las escuelas y promuevan la alta cultura.
  9. Llevar a cabo un programa de libros en los parques, una carpa, algunos estantes repletos de libros, quizá foros para que la gente lea, cante, diga o lea un poema y también para que la gente que asiste a estos lugares pueda ponerse a leer en el parque y devolver el libro.

La coyuntura que se presenta es formidable. El proyecto de cultura de que ha hablado Claudia Sheinbaum parece sumamente ambicioso y Paco Ignacio Taibo II ha sido por muchos años un gran promotor de la cultura que ha hecho un enorme trabajo y sigue haciéndolo. Ha repartido millones de libros y hecho cientos o miles de conferencias sin ningún apoyo gubernamental. Es de esperar que con presupuesto y apoyo del gobierno la labor de Taibo se potencie.
Muchas gracias por su atención.
Por el cambio profundo, por la Cuarta Transformación de la Patria. Viva México, Viva nuestra Ciudad. Viva nuestra delegación.