martes, 8 de julio de 2008

El gobierno de Calderón al servicio de los ricos

México se encuentra en una terrible circunstancia de desintegración. Los síntomas son francamente de desastre. El gobierno está cada vez más cerca de no gobernar a nadie. En primer lugar, los grandes potentados que proveyeron de recursos al presidente espurio están cobrando sus favores. Hoy no sólo son ingobernables para la administración de Felipe Calderón, sino que ellos le dictan las órdenes.
Por ejemplo: en 2007, según cifras de la Bolsa Mexicana de Valores, CEMEX registró ventas por 236 mil 669 millones de pesos, sólo pago el 2% de impuesto sobre sus ventas; TELCEL, con ventas por 311 mil 579 millones de pesos, pagó el 3.9%; Bimbo, con 72 mil 294 millones de ventas, pagó el 2.3%; WAL-MART, con 224 mil 173 millones, pagó 2.5%. COCA-COLA, con ventas de 68 mil 969 millones, pagó 4.8%; GRUPO MÉXICO vendió 68 mil 412 millones y pagó 7.6%; KIMBERLY CLARK, vendió 21 mil 480 millones de pesos y pagó el 5.7% y GRUPO MASECA que vendió 9 mil 11 millones de pesos y pagó el 2.9% de sus ventas. Habría que agregar que estas empresas presentaron impuestos diferidos en sus balances por 74 mil 471 millones de pesos; es decir, obtuvieron créditos fiscales por el doble de lo que pagaron de impuestos.
Por otra parte, los poderes fuera de la ley, como son los narcotraficantes, tienen cada vez más en jaque al gobierno. La Organización de las Naciones Unidas ha manisfestado a través de uno de sus altos funcionarios que el real poder en México se encuentra en manos de los capos del narcotráfico en el 60 por ciento de los municipios del país. Es decir, en tales sitios no gobierna el presidente espurio Calderón.
México se encuentra sometido a los caprichos de la poderosa nación del norte, EU, quien ha impuesto a nuestro país el acuerdo llamado Iniciativa Mérida, a través de la cual nuestro país deberá admitir la intromisión de fuerzas armadas norteamericanas. Además, éste es el inicio a la integración de México a la ASPAN (Asociación para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte -¡sic!) que colocará a México como un enemigo más del poder islámico y, con ello, como objetivo militar de los enemigos de EU conseguidos gracias a su histórica actitud de depredación.
Por último, como el más grave atentado contra la nación, el gobierno de Felipe, el Espurio, Calderón, ha dado a conocer su propuesta de modificaciones a la ley para entregar Pemex a las grandes compañías transnacionales.
Para realizar este acto de traición a la patria, Calderón pretende hacer creer que sus leyes no son privatizadoras, lo cual es una burda mentira. No es posible llamar de otra manera al hecho de que se proponga que las compañías transnacionales tengan acceso a todos los trabajos de Pemex (lo cual prohibe la Constitución Mexicana) y el gobierno diga obsesivamente que no es privatización entregar el trabajo de Pemex a las compañías privadas.

No hay comentarios: